El defensor General, Gastón Mercado Luna habló sobre la violencia social y cuestionó que esa violencia se promueva desde el Estado nacional. Alertó sobre el rol de los medios y respecto «al cansancio con las instituciones» como resorte para la aparición de fenómenos como Trump o Milei.
El defensor General, Gastón Mercado Luna visitó los estudios de Riojavirtual Radio para hablar sobre un aumento de la conflictividad social como consecuencia directa del impacto de la crisis social y económica en la sociedad.
«Hay un aumento de la conflictividad social y lo que está disminuyendo son los resortes del Estado. Hay una crisis social, moral, política, económica y eso afecta y se ve en la Defensoría General», dijo Mercado Luna.
El funcionario agregó que en esa alta conflictividad incide también el rol de los medios masivos de comunicación. «Acá inciden también los medios desde donde se promueve la desunión, los gestos de violencia y la falta de solidaridad y eso se refleja tremendamente», afirmó.
Mercado Luna destacó que esa alta conflictividad está marcada de un aumento de los problemas intrafamiliares. «En el interior aumentan los casos de abusos dentro del ámbito familiar, también el tema de la alimentación producto de la falta de responsabilidad parental para con los hijos. También las exclusiones del hogar. Esto tiene que ver con una sociedad descompuesta», indicó.
En este contexto, el funcionario destacó que hoy en la Argentina esa violencia social es promovida desde el Estado nacional. «Lo que vivimos hoy es inusitado. Nunca antes se vio que la violencia venga de arriba. Yo me crié con un discurso de Alfonsín convocando a la unión nacional y leyendo el preámbulo. Y acepté derrotas con un Carlos Menem que hablaba de una revolución productiva y del salariazo. Y con un peronismo que decía que gobernar es dar trabajo. No me crié con un presidente que festeje que ya van despidiendo 70.000 personas y que van cerrando 17 organismos nacionales. Y que el logro es cerrar y apretar y no enviar recursos para que una supuesta casta la pase mal», dijo al respecto.
Mercado Luna cuestionó «el discurso violento» que emana del gobierno de Javier Milei. «Hoy desde el Estado se elige cada día a una persona para condenarla, como sucedió con una artista. O se da like a una figura de un chico con otras capacidades para descalificar a un gobernador que defiende sus recursos como sucedió con Torres. Hay una violencia inusitada que se va repitiendo y se va contagiando», alertó.
El Defensor general consideró que si un organismo funciona mal la solución no es cerrarlo sino mejorar los controles. «Si algo está mal hay que corregir a las personas y no voltear a las instituciones. Si los fondos de las provincias para el transporte están mal manejados controlemos que se manejen bien, no los cortemos. Si las universidades están, como dicen ellos, tomadas ideológicamente por un sector político que no es el de ellos, no hay que condenarlas sacándole los fondos para que los estudiantes no puedan estudiar», argumentó.
Mercado Luna habló luego del surgimiento de outsiders en la política a nivel mundial como Donald Trump en EEUU y Milei en la Argentina y dijo que son una consecuencia directa «del cansancio con las instituciones y sus dirigentes». «Esto también es producto del cansancio. La democracia y sus instituciones se cansan porque se cansan las personas que las conducimos y la clave es poder ver esto. A veces cuando a las instituciones las desprestigiamos, la sociedad termina cansándose y terminan apareciendo estos fenómenos autoritarios como Trump o Milei. Esto de desprestigiar a la política generó esos fenómenos», dijo.
En la misma línea, sostuvo que «el cansancio contra las instituciones no es contra las instituciones sino contra los dirigentes. En eso debemos mejorar no para destruir las instituciones sino para que esto sea algo más pasajero y que los dirigentes podamos pasar y estar más a un costado pero no golpear al sistema», opinó.
Mercado Luna anticipó luego que la paralización de la obra pública generará aún mayores niveles de conflictividad social. «Estamos ante un Estado con el que no se come, no se educa y no se vive. Esto será una explosión. En un año vamos a tener un grave problema de vivienda en La Rioja por la paralización de la obra pública. Va a haber una conflictividad mayor porque esos jóvenes que quieren acceder a una vivienda terminan hacinados en la casa de algún padre, con sus hijos y ahí empiezan los problemas intrafamiliares. Esto va a pasar sobre todo en lugares alejados, lugares donde hay menos educación como en el interior profundo de La Rioja y de la Argentina. Esto va a pasar», alertó.
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