Tanto el candidato a senador como la actual legisladora nacional se sumaron a las críticas al Gobierno Provincial, en medio de denuncias por parte del municipio de asfixia financiera e incluso la desintegración del Tribunal de Cuentas Municipal.
El intendente capitalino Alberto Paredes Urquiza lanzó una muy dura acusación contra el PJ, el partido que gobierna La Rioja hace más de 30 años y al cual el pertenecía pero abandonó tras disputas internas con el bederismo.
“Vienen por mi”, lanzó Paredes y señaló que un sector del PJ intentará destituirlo y advirtió que la no acreditación de pago a los programas sociales o la desintegración del Tribunal de Cuentas Municipal, que será absorbido por su par provincial, es parte de la estrategia “desestabilizadora” por no apoyar al oficialismo en ellas elecciones legislativas de octubre.
Inmediatamente encontró el apoyo de dos sectores completamente opuestos. El ultrakirchnerista de Tere Luna, y el de Cambiemos, al mando de Julio Martínez.
La primera “Lo llamé al Intendente Paredes Urquiza para solidarizarme por la calidad institucional, especialmente con el sector más débil de la Municipalidad (planes PEN), encima que cobran un mínimo es grave”.
“No es un hecho aislado, no es la primera vez que ocurre, también lo vimos en Chamical y habla de la falta de transparencia”, afirmó Luna y dijo que llevará la cuestión al Senado de la Nación.
Julio Martínez, por su parte, fueron más duros y sostuvieron que “es un claro mensaje mafioso del gobernador (Sergio) Casas y Beder Herrera, en no enviar el dinero para el pago de los programas PEM”.
Finalmente, pidió que “que el salario de los trabajadores no debe ser una herramienta electoral, que se debe dirimir en otro ámbito y con otras herramientas y no con el bolsillo de los trabajadores”.
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