En abril pasado Alan Suarez fue encontrado sin vida en su casa de Chepes. Para la policía, su madre y la justicia se quitó la vida, sin embargo un informe del perito forense puesto por el padre, afirma que el niño fue estrangulado y no murió por ahorcamiento.

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El 16 de abril pasado Chepes se vio conmocionado por la aparición sin vida de Alan Suarez de 11 años en el fondo de su casa.

Fueron vecinos que vieron que el menor yacía colgado de un árbol y quienes dieron aviso a la policía. En ese momento el niño estaba al cuidado de sus hermanas de 2 y 7 años.

En un primer momento su propia mamá, la policía y la justicia dieron como causal de la muerte un suicidio. Pero ahora todo cambio tras el informe del perito de parte puesto por su papá, quien siempre cuestionó la crianza de la mamá del menor e incluso sostiene que Alan quería irse a vivir con él porque habría sufrido maltrato.

En esa línea, el abogado Nicolás Mercado, querellante del padre de la víctima, informó los resultados del perito de parte, en torno a la necropsia que se realizó en el cuerpo de Alan.

Según Mercado, el informe del doctor Daniel Marcelo Cáceres, se diferencia claramente de los resultados primarios de la investigación ya que no habla de muerte por ahorcamiento, sino por estrangulamiento.

“La muerte fue producida por una compresión extrínseca de cuello, para lo cual se utilizó un lazo, específicamente un cable”, indica el informe, que además agrega que se constataron “dos surcos en el cuello, ambos por debajo del cartílago tirodeo, horizantolizados al eje del cuerpo”.

Las heridas “no son compatible con ahoracadura, sino por estrangulamiento con la utilización de lazo”, sentenció Mercado, en base al informe de Cáceres.

Al respecto, el abogado criticó el accionar de la juez Martínez Roldán y del fiscal Julián de la Colina, al sostener que “no es lo que se vino afirmando en la investigación”.

“Cambia sustancialmente la investigación. Voy a seguir insistiendo con medidas investigativas”, agregó el letrado.

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