La licenciada en Nutrición y docente de la Universidad Barceló, Romina Flores y un grupo de alumnas recomendaron introducir cambios en la alimentación para tener una vida más saludable. La importancia de la Ley de Etiquetado Frontal.
Los malos hábitos alimenticios generan problemas de salud en la población, entre las que se destacan el sobrepeso, la obesidad y diabetes, entre las más comunes.
Romina Flores, licenciada en Nutrición y docente de la Universidad Barceló y un grupo de alumnas de esa carrera hablaron con Riojavirtual Radio que este jueves salió al aire desde la Feria del Libro.
Flores sostuvo que los cambios de hábitos en la alimentación son la clave para tener una vida más sana. «Cambiar el hábito en la alimentación es lo importante y no focalizarse en bajar de peso. Ya no hablamos de dieta sino de un plan de alimentación, tratar de incorporar nuevos alimentos. Hoy lo que más se nota en la población es la mal nutrición por exceso de alimentación, obesidad, sobrepeso y todas las enfermedades crónicas no transmisibles que esto genera», afirmó.
La especialista agregó que en la Argentina «la población está acostumbrada a consumir cereales como base de la alimentación». «Hay que tratar de cambiar los sabores con algo que sea saludable. Se pueden buscar cereales que solo sean integrales o con alto contenido en fibras. Por ejemplo, si se va a cocinar un guiso lo podemos hacer con arroz integral o incorporando más verduras», señaló.
En este punto, tanto Flores como sus alumnas recordaron que en el país está aprobada la Ley de Etiquetado Frontal y que está próximo a aparecer en las góndolas de los supermercados los primeros alimentos con esta inscripción. «Muchos de los productos que son considerados diet o light significa que algunos de los nutrientes que tienen están disminuidos. Por eso es muy importante la aprobación de esta ley, que se ponga en marcha y que nosotros educar para el consumo de esto alimentos», recalcó.
Flores dijo que para tener una vida más sana «no se busca que la gente no coma nada sino que se reduzca el consumo de determinados alimentos». «Se puede comer de todo pero en ciertas porciones, hay que reducir la frecuencia, disminuir el consumo», dijo.
La nutricionista informó que antes de comprar un producto, los consumidores deben leer minuciosamente la información nutricional de dicho producto. «Hay que fijarse las cantidades de azúcar de los productos, que no tengan alto contenido en sodio. Además, hay que reducir el consumo de sal y para eso una buena práctica es empezar por no llevar la sal a la mesa. Es un pequeño gran cambio», recomendó.
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