Los abogados del condenado a 8 años de prisión por el crimen de su vecino se reunieron con el mandatario provincial, quien tiene facultades para indultarlo y dejarlo en libertad. Cano sostuvo que el fallecido hostigaba y amenazaba permanentemente a sus hijos.

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El abogado defensor de Juan José Cano, el hombre condenado a 8 años de prisión por asesinar a Diego Torres, se reunió este martes con el gobernador Ricardo Quintela para pedirle al mandatario que indulte a su defendido.

En esa reunión, Pagotto expuso ante Quintela los detalles y las circunstancias que rodearon al caso y que terminaron con la condena a prisión de Cano.

La defensa de Cano considera que el Caso Cano fue emblemático y que la muerte de Diego Torres derivó de una situación de legítima defensa por parte del condenado.

Tras la reunión, Quintela dijo: «Los escuché y estudiaremos, junto al equipo de asesores legales, este petitorio».

Días atrás, Pagotto habló sobre porqué se recurrió al pedido de indulto y dijo que desde la defensa entienden que el juicio a Cano «es un asunto que el Poder Judicial no pudo resolver, ya sea por un déficit en el modo de proponer la acusación por parte de los fiscales, o al momento de recolectar las pruebas. Distintas razones llevaron a una resolución que la defensa siempre ha considerado injusta», afirmó.

Hay que recordar que el artículo 12 de la Constitución Provincial, en su inciso 8, establece que entre las atribuciones del Gobernador está la de conceder indultos y conmutar penas, previo informe del Tribunal Superior de Justicia, con excepción de las que recaigan con motivo de los delitos referidos a alzamiento para cambiar la Constitución o para deponer los órganos de Gobierno, y de los cometidos por funcionarios sometidos al procedimiento de Juicio Político.

El hecho que terminó con la muerte de Torres ocurrió el 31 de octubre de 2017. Cano fue quien mató de Torres y luego del hecho el propio acusado reconoció su autoría en este crimen. Cano expresó su arrepentimiento por el hecho, pidió disculpas a la familia de la víctima y dijo que lo sucedido había sido «una tragedia». De hecho, en el juicio la defensa había basado su estrategia en la legítima defensa ya que Cano había sido atacado por Torres con un palo con puntas.

También hay que destacar que, según se sostuvo desde la defensa, los hijos de Cano eran constantemente hostigados y amenazados por el fallecido Diego Torres.

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