El escenario económico nacional condicionará a la próxima gestión provincial y el tema fondos será muy complejo en 2024. La importancia que tendrán los senadores y los diputados nacionales. Y la coincidencia de Felipe y Ricardo. Por Mattías Meragelman.
Aunque ellos no lo sepan, los candidatos a gobernador Ricardo Quintela y Felipe Álvarez comparten una preocupación: el escenario económico que les tocaría enfrentar en caso de ser electos como mandatarios provinciales el próximo 7 de mayo.
En cualquier conversación con ambos dirigentes o sus equipos de campaña, los primeros minutos son dedicados al análisis de lo que se viene de cara al 7 de mayo, pero luego la charla deriva en la preocupación sobre qué podría ocurrir con las cuentas, las obras públicas y las industrias durante los próximos cuatro años.
La falta de reservas en el Banco Central, la sequía que afecta especialmente al sector agroexportador, el proceso inflacionario, el crecimiento de la pobreza y los compromisos con el Fondo Monetario Internacional por varios miles de millones de dólares para el próximo año, determinan que el 2024 se anticipe sin dudas como un año complejo.
La Rioja tiene un fuerte condicionamiento en su funcionamiento económico de los fondos nacionales y eso no admite muchas discusiones numéricas: produce solamente el 0,2% de las exportaciones del país, un mes de los fondos de coparticipación nacional equivalen a nueve meses de la recaudación provincial y se estima que de cada 100 pesos que gasta el Estado provincial 90 pesos llegan desde el reparto nacional. Si la Nación estornuda, La Rioja se tiene que tomar la temperatura.
Entonces, qué es más importante: ¿El resultado del 7 de mayo o el de las elecciones nacionales del 22 de octubre?
En el peronismo tomaron nota del tema, y más allá de que trabajarán fuertemente para que el “Frente de Todos”retenga el poder en la «Casa Rosada», en los principales despachos de la “Casa de las Tejas” está bastante fresco el recuerdo de lo que fue la convivencia del ex gobernadorSergio Casas con el ex presidente Mauricio Macri.
«La elección de los candidatos para las PASO de senadores y diputados nacionales tendrá muy presente la dinámica de los sectores internos del peronismo riojano, los que quedaron afuera el 7 de mayo, pero especialmente quiénes dan más garantías de gestión en el Congreso Nacional para la etapa que se viene», comentó uno de los principales armadores del oficialismo.
En ese sentido, van más allá y explican: «El Gobernador necesita gente de confianza y con buena relación con otros legisladores, vamos a necesitar el apoyo de todos para gestionar recursos el próximo año».
¿Habrá una lista oficial y otra muleto para buscar tener la totalidad de los cargos legislativos en disputa? ¿Esa estrategia política es segura o pondrá en riesgo los cargos? ¿El Instituto Patria o la Casa Rosada impondrán algún nombre en particular? ¿Hasta dónde crecerá la intención de voto de Martín Menem arrastrado por el fenómeno de los libertarios y la figura de Milei? ¿Juntos por el Cambio respetará en los cargos nacionales los acuerdos que se establecieron para poder llegar unidos al 7M?
Cada vez se ven menos matices entre las gestiones de Sergio Massa como ministro y lo que podría realizar un economista de «Juntos por el Cambio» en su mismo cargo.
El Fondo de garantías de las jubilaciones, el ajuste impuesto por el Fondo Monetario o los dólares diferenciados para exportadores, los muestran cada vez más cerca a uno del otro y la grieta a veces parece más un debate mediático que eclosiona en las mesas familiares de los domingos que una realidad de gestión.
Sin embargo, para provincias como La Rioja con desarrollos industriales textiles o del calzado y con una dependencia tan marcada de la presencia del Estado al momento de realizar obras públicas, no es igual que las importaciones se abran o no, que se construyan viviendas sociales o que no se hagan.
Más allá del juego periodístico que el título de este comentario político plantea, está claro que lo más importante es el 7 de mayo. No es lo mismo una Provincia administrada por el peronismo que por “Juntos por el Cambio” o por los libertarios. Felipe Álvarez, Ricardo Quintela, Martín Menem o Carolina Goycochea cada uno tiene una mirada muy diferente sobre las tareas a desarrollar en caso de ocupar el cargo político más importante de la Provincia.
En las elecciones nacionales se juega mucho. Se disputa un modelo de país, y por ende un estilo de vínculo entre el Estado federal y las provincias. Será un año con muchos domingos cuyos resultados tendrán una incidencia directa en nuestras vidas cotidianas.
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