Jaqueado por la falta de fondos, no paga a proveedores, reduce la compra de insumos básicos como combustibles y adeuda varios meses de trabajo a empleados precarizados del propio municipio. Ruptura con Nación y mala relación con provincia.
El municipio capitalino está prácticamente en ‘default’ y hay diversos factores que llevaron a esta crítica situación a la gestión Paredes Urquiza.
Hace meses e incluso más de un año que no paga a proveedores, muchos de los cuales cansados de los incumplimientos le cerraron sus puertas. «Cuando hay plata compran fuera de La Rioja, cuando no hay nos fía a nosotros y después no pagan», son algunos de las reclamos que se escuchan en el mundo empresarial.
Por otra parte, Hacienda confirmó que redujo al máximo la compra de insumos básicos como el combustible, adeuda el pago de tres meses de trabajo a empleados precarizados por ejemplo del Canal Municipal quienes paralizaron el medio de comunicación, entre otros ejemplos.
Entre las razones podemos describir la falta de gestión para generar recursos propios como mejorar la recaudación y solo buscar hacerlo con constantes moratorias, pero la principal son las decisiones políticas del propio intendente capitalino.
Nunca un jefe comunal rompió relaciones con provincia y con Nación al mismo tiempo. Paredes Urquiza lo hizo, empecinado en una candidatura a gobernador que lo desvela y le provoca indefiniciones constantes.
En Casa Rosada sostienen que «mordió la mano de quien le dio de comer. Le dimos financiamiento no solo para gastos sino obras millonarias y no tenemos gestos políticos de su parte».
Desde el PJ riojano no le perdonan haber jugado este último tiempo «con el gobierno (nacional) y haber atacado constantemente a la provincia. Nunca un peronista llegó tan lejos de jugar abiertamente para la UCR como lo hizo Alberto con Julio Martínez», advierten.
En este contexto navega el intendente capitalino, que pese a tener un municipio en llamas deja trascender que será candidato a gobernador por la ancha avenida del medio, sin apoyo del PJ local ni de Nación, lo que de ser así lo deja sin la menor chance de llegar al Poder Ejecutivo Provincial.
Son muchos los que dicen que Paredes Urquiza solo terminará buscando su reelección como jefe comunal. Meses atrás nadie dudaba que tenía un triunfo atado, hoy sus errores políticos ponen en riesgo incluso su continuidad en el Palacio Ramírez de Velasco.
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