Hay ocho policías imputados, cuatro de ellos para los que la fiscalía pide cadena perpetua. Emmanuel Garay murió a comienzos de 2018 luego de un entrenamiento en la Escuela de Cadetes en el cual la querella denuncia salvajes vejámenes.

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Finalmente este martes llegará al final el juicio que investiga la muerte del cadete Emmanuel Garay el 10 de febrero del 2018 por un cuadro de deshidratación, luego de participar junto a 16 jóvenes aspirantes, en el primer día de clases en la Escuela de Cadetes de la Policía de La Rioja.

Dicho cuadro se produjo según la querella por literalmente “torturas” a las que fueron expuestos los cadetes en su entrenamiento según el relato de los aspirantes a policías.

De acuerdo a las denuncias de las víctimas y sus familiares, los chicos fueron sometidos a 12 horas de ejercicios extremos al rayo del sol ese lunes con 40°.

Pero creen que en “la sartén”, como le dicen a la cancha de concreto donde los obligaban a permanecer, la temperatura real era mayor.

En ese contexto, fue el fiscal Julian de la Colina el que solicitó prisión perpetua para cuatro comisarios. Ellos son Dardo Gordillo, Ramón y Jorge Leguiza y Elio Marcial.

Les imputa ser penalmente responsable de el Homicidio Calificado por Ensañamiento de Emanuel Garay y lesiones graves de otros 15 cadetes, en el caso de los hermanos Leguiza y Gordillo. Mientras que Marcial está acusado de lesiones graves de 8 cadetes.

Además solicitó 7 años de prisión efectiva para Adriana Rodríguez y Nadia Bravo por las lesiones graves de las 7 cadetes mujeres heridas. También un año y medio de prisión en suspenso para Marcos Miranday y Karina Luna por los delitos de incumplimiento de los deberes de un funcionario público y abuso de poder.

En esa línea, la querella que representa a la familia Garay, se mostró de acuerdo con las penas solicitadas por la fiscalía. “Estamos conformes con el pedido. Es lo que estábamos esperando”, dijo el abogado Nicolás Azcurra.

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