Esto incluye a radicales y peronistas disidentes. Lo fue hasta diciembre Julio Martínez, pero tras su derrota en un nuevo intento por ser gobernador deja sin chances. Felipe Alvarez tiene toda las posibilidades. Porqué no Inés Brizuela y Doria.

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Tras las elecciones de diciembre pasado el ala opositor de la política riojana busca por estos tiempos un nuevo referente. Recordemos que la oposición está conformada por radicales, peronistas disidentes y dirigentes del pro.

En ese contexto, la realidad es que Julio Martínez tras su cuarta derrota electoral como candidato a gobernador debe dar un paso al costado de ese rol y todo indicaba que ese lugar lo debía tomar Alberto Paredes Urquiza o Inés Brizuela y Doria, pero no será así.

El primero dilapidó su caudal político tras una fallida alianza con Beder Herrera y romper con el frente opositor Juntos por el Cambio. El resultado de esto fue la pérdida de la intendencia capitalina que intentaba retener y el actual ostracismo político.

Por otro lado se pensaba que la dirigente radical sería la heredera natural de Julio Martínez para quedar como referente de la oposición, pero la crítica situación de la municipalidad la ata de manos por su dependencia económica de la provincia. De hecho hoy parece más una aliada del oficialismo que una dirigente opositora.

Y allí surge el nombre de Felipe Alvarez, actual diputado del bloque Producción y Trabajo. Es uno de los más férreos críticos de la gestión de Sergio Casas y el nuevo gobernador Ricardo Quintela, y a su vez mantiene vínculos tanto con dirigentes del oficialismo como la oposición a nivel nacional.

En el arco opositor de peronistas disidentes, radicales y pro sostienen que tiene la oportunidad histórica para convertirse a los 39 años en la figura que los represente. Fue uno de los grandes ganadores de la Capital en el 2019, pero tiene mucho por construir en el interior provincial.

Los próximos meses determinarán finalmente quien comienza a perfilarse como el nuevo referente opositor en la política riojana, ya que actualmente ese lugar ese lugar está vacante.

Pero lo único seguro es que todos necesitan de todos. Cualquier tipo de quiebre en este bloque opositor que nuclea a los peronistas disidentes, radicales y pro los dejaría sin posibilidades de pelear el poder real con el omnipresente peronismo que hoy lidera Ricardo Quintela.

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