Docenas y docenas de médicos si bien sostienen que respetan que podría salir la ley, advierten que se resguardarán en lo que llaman «objeción de conciencia» para no hacer abortos. Además rechazan de plano las estadísticas de sectores feministas sobre abortos en La Rioja y dan cifras: 2 muertes en 5 años.
“No cuenten conmigo”, es el grito de los médicos contra el aborto en Argentina y La Rioja no es la excepción. Así lo expresan en medios de prensa y redes sociales distintos profesionales de la salud que rechazan verse obligados a realizar abortos en caso que finalmente el proyecto de Ley de Interrupción Voluntaria del Embarazo.
En esa línea, por ejemplo el reconocido ginecólogo Juan Carlos Vergara, quien también fue ministro de Salud, sostuvo que «no estoy a favor de la legalización ni la despenalización del aborto, y si voy a tratar de trabajar en todo lo que pueda para que se pueda potenciar aquellas herramientas para favorecer la no interrupción del embarazo”.
A su vez, respecto a la posibilidad de que se vean obligados por la ley, indicó que sería inconstitucional y afirmó que las clínicas deberán poner un listado de quienes no estén dispuestos a realizar esas intervenciones.
“Un listado por qué la objeción de conciencia individual es una herramienta que tenemos los ginecólogos en este caso u obstetras, que somos los que deberíamos llevar a cabo el procedimiento, en la cual es algo muy privado y que nadie puede violar lo que yo piense sobre la vida. Creo que debe haber una lista en las instituciones de todos aquellos médicos que son objetores de conciencia “, afirmó.
Por otra parte, negó que en La Rioja mueran docenas de mujeres por año como señalan sectores feministas por abortos clandestinos y según estadísticas provinciales oficiales que señala Vergara, “las últimas dos muertes en La Rioja en pacientes con complicaciones por aborto fueron en el 2013. Hace 5 años que en nuestra Provincia no se muere ninguna mujer por aborto o sus complicaciones.
Otro que salió con los tapones de punta fue Sergio Feryala, también ginecólogo, al sostener que «con o sin ley, en mi hospital y en mi servicio no se hacen abortos». El médico trabaja en el Hospital Vera Barros y es profesor titular de la catedra de Ginecologia en la Universidad Nacional de La Rioja.
Pero luego le bajó el tono y sostuvo lamentar que «nadie llamó a los médicos hospitalarios para que demos nuestra opinión. Por eso ratifico que por ahora no hay ley, pero si hay ley, vamos a hacer todo lo posible para que esa ley no se aplique aquí, porque es una mala ley».
«Los argumentos que se esgrimieron para darle media sanción son falsos, y ponen de mascarón de proa a las mujeres pobres que se mueren, cuando las muejres pobres en la argentina se mueren de a miles de cáncer de útero o de mama, de ello tienen que salir a hacer marchas», sentenció.
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