El edil de JxC y candidato a renovar su banca, Nazareno Rippa admitió que «fue negativo» el saldo que deja el Concejo actual tras casi cuatro años de labor parlamentaria. «Hace falta un Concejo que escuche a la gente y en el que prime el diálogo», afirmó.
El concejal de Juntos por el Cambio (JxC) y candidato a renovar su banca, Nazareno Rippa analizó la labor parlamentaria de la actual composición del Concejo Deliberante y opinó que el saldo, al cabo de casi cuatro años, «fue negativo» por lo que reclamó dar un salto de calidad en el cuerpo de ediles que se viene cuando se vote el próximo 7 de mayo.
«Creo que si bien se logró avanzar en algunas normas, en términos generales, lo que se vio para la sociedad fueron peleas, disputas, los juicios políticos en el medio que nos hicieron perder mucho tiempo y la fricción que esto significó y la degradación en las relaciones dentro del Consejo. A mi parecer, la síntesis del trabajo en el Concejo fue negativa. No hemos logrado abordar grandes proyectos con grandes discusiones por las peleas, las chicanas, el escándalo, siempre buscando la forma de entorpecer al otro en vez de buscar las grandes coincidencias y el trabajo en conjunto. Nuestra intención siempre es buscar el diálogo, el trabajo y la construcción conjunta», dijo el edil en Riojavirtual Radio.
Rippa se esperanzó en que los ediles que asuman en el próximo Concejo «puedan generar ese Concejo de puertas abiertas, escuchar a la gente y brindar las soluciones que corresponden».
«Para el próximo Concejo proponemos no plantear chicanas que puedan entorpecer, queremos hablar sobre las problemática que tienen los barrios, sobre cómo financiar mejor los servicios, las obras del municipio y nuestra educación municipal. Hay que cambiar el rumbo en el Concejo y ese rumbo no solo se cambia con honestidad y decencia sino también con el diálogo, si no avanzamos con el diálogo siempre vamos a estar peleándonos», señaló.
Por último, señaló: «Muchas problemáticas nos azotan como sociedad, no solo en lo económico, la gente la está pasando mal. hay problemáticas como las adicciones, falta de oportunidades, violencia, todas cuestiones que reclaman un Estado presente para tratar de cambiar el rumbo y nosotros nos ponemos a consideración de la ciudadanía para poder ser ese cambio».
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