Los tiempos se aceleraron y las piezas dentro de la oposición riojana comenzaron a moverse. ¿Van unid@s? ¿Se dividen en dos o en tres? ¿Por qué Quintela sigue teniendo la última palabra?
La convocatoria a elecciones internas de la Unión Cívica Radical para el 6 de noviembre, la reaparición en la escenapública del presidente del Pro Julio Sahad, la visita de la presidenciable Patricia Bullrich, Felipe Álvarez completó la vuelta a los 18 departamentos, Julio Martínez subió su nivel de exposición pública y Guillermo Galván insiste en todas las notas sobre su expectativa de ser candidato a mandatario provincial.
Ese recorrido por los hechos políticos ocurridos en las últimas semanas, marca que los tiempos de la oposición se aceleraron y ya casi nadie disimula sus aspiraciones para el 2023.
La gran pregunta de aquí hasta el cierre de listas es si los espacios enfrentados al Gobierno provincial lograrán presentar una lista de unidad, se dividirán en dos sectores o si como ocurrió en el 2021 habrá tres representacionesde la oposición.
En la candidatura a Gobernador de la provincia dos nombres ya están lanzados. Tanto el viceintendente de la Capital, Guillermo Galván, como el diputado nacional Felipe Álvarez, hicieron públicas sus aspiraciones de pelear el cargo más importante de la política provincial.
En el caso de Galván, en cada una de sus intervencionesapunta con duras críticas al Gobierno provincial, buscando posicionarse en su postulación como el referente más crítico de la gestión de Ricardo Quintela. La idea de ser un “halcón” al momento de hablar de la administraciónprovincial, se consolida con la elección de Patricia Bullrich como su presidenciable para el 2023.
Mientras tanto, Álvarez ya recorrió los 18 departamentos de la provincia en los últimos meses, consiguió tener representantes políticos en cada uno de ellos y esta semana sumó un nuevo espaldarazo público de Horacio Rodríguez Larreta. El Jefe de Gobierno porteño dijo en “Riojavirtual Radio” que el diputado nacional es su referente en La Rioja.
Más allá de estos nombres ya presentados, la gran duda es qué hará el senador nacional Julio Martínez.
¿Será por quinta vez candidato a Gobernador de la Provincia? Todo indica que no, el chileciteño estaría pensando en buscar renovar su banca de senador. Sin embargo, hay un dato que juega políticamente a su favor, es el dirigente de la oposición más posicionado y conocido por la población. Años de campaña lo volvieron un nombre que no necesita ser instalado (tanto en Capital como en el interior provincial).
¿Y en Capital? Si las elecciones fueran hoy no hay dudas que la candidata sería la actual intendenta Inés Brizuela y Doria. No existe en la oposición ningún otr@ dirigente que tenga su nivel de instalación y posicionamiento en la ciudad.
El problema es que la Jefa comunal enfrenta el desgaste de una gestión que decepcionó a una parte de sus votantes y que no cumplió las expectativas que existían en diciembre del 2019, especialmente en materia de bacheado de las calles.
Sin embargo, en el Palacio municipal “Ramírez de Velasco” advierten sobre un punto: la expectativa de tenerdesde 2023 un Gobierno nacional comandado por “Juntos por el Cambio” y cómo impactaría eso en el humor social previo a las elecciones provinciales.
“En la Capital hay un votante anti K o anti quintelista que va a votar en contra de cualquier candidato que postule el Justicialismo y que acepta el argumento de que nos faltaron recursos en estos cuatro años. Entonces va a existir la expectativa de tener en la Casa Rosada a alguien que financie de manera directa la gestión y nos permitamostrar lo que somos capaces de hacer si tenemos recursos”, se ilusionan en el cuarto piso al pensar la campaña que se viene.
¿Felipe Álvarez candidato a gobernador con Inés Brizuela y Doria postulante a la intendencia? ¿Julio Sahad como primer aspirante a diputado nacional y Julio Martínez como senador nacional?
Ese escenario podría dejar content@s a algun@s, pero fuera de la construcción política a otr@s. Suena sencillo de plantear, pero hoy parece difícil de concretar. Todas las partes se siguen pasando facturas internas por cómo fueron los cierres de listas en 2019 y en 2021, remarcando cada un@ lo que cedió en aquellos momentos.
Por eso los mismos nombres se pueden mover hacia otros lugares o terminar enfrentad@s. Hay una discusión interna que se debe dar y que tiene el antecedente de no haber llegado a un buen puerto hace dos años, cuando terminaron saliendo a la cancha separad@s.
Luego del buen resultado que obtuvieron en las legislativas del 2021, l@s libertari@s son otro de los actores que se deben tener en cuenta de cara a las elecciones del próximo año.
«La Libertad Avanza» tiene dos definiciones centrales yatomadas: la primera es que cualquier unión con otros espacios debe ser ideológica, compartir la mirada sobre qué se debe hacer en el país y en la Provincia. Y la segunda es que los posibles aliados se deberían sumar a este espacio. “La Libertad Avanza no renunciará a encabezar el proceso político, si se quieren sumar son bienvenidos, pero nosotros encabezaremos la alianza”, sostienen.
En ese escenario y ratificando los planteos que su referente nacional Javier Milei viene realizando, hoy el espacio está lejos de una unión con otros sectores y si los comicios fueran el próximo domingo, habría que pensar en que presentarían candidat@s propi@s.A esta descripción se le debe sumar la presencia del FROP, hoy distanciado del Gobierno provincial y crítico de la política económica del “Frente de Todos”. Un espacio que logró en 2019 acrecentar su presencia en el interior provincial y ocupar varios escaños de concejales, lo que sin dudas será el punto de partida para pelear el año que viene.
Finalmente, la Izquierda mantendrá su posición equidistante de la grieta. Por ahora esos sectores no lograron en La Rioja ser catalizadores del descontento con la dirigencia tradicional, algo que sí ocurrió en provincias como Salta, donde obtuvieron una importante representación parlamentaria. Algo que buscarán revertir el año que viene en tierras riojanas.
En todo este mapa, increíblemente la palabra final la sigue teniendo el principal referente del oficialismo: Ricardo Quintela. El mandatario definirá la discusión de la oposición cuando determine unificar o no las elecciones provinciales con las nacionales.
El Gobernador ya dijo varias veces que los comicios provinciales coincidirán con los nacionales, ratificando que no habrá adelantamiento de la convocatoria a las urnasriojanas.
Sin embargo, todas las fuentes de la oposición consultadas para este comentario estuvieron de acuerdo en decir lo mismo: no le creen. Imaginan que se estará votando en el primer cuatrimestre del próximo año.
Y el argumento central que repitieron fue que Quintela tendría muchas posibilidades de ser reelecto con comodidad si se despega del impacto nacional y los problemas económicos de la gestión del “Frente de Todos”. Mientras que en caso de unificar con la Nación, el arrastre de l@s candidat@s presidenciales opositores potenciaría las chances de los postulantes provinciales de la oposición.
La oposición sabe que sus expectativas electorales dependen de dos datos: ir unidos y que la Provincia no desdoble los comicios.
La posibilidad de que terminen junt@s está directamente relacionada a la capacidad de negociar sus “egos políticos” en una mesa de debate, en donde deberán ceder algunas aspiraciones personales si pretenden llegar a un acuerdo.
La marcha peronista tiene un párrafo que afirma: “Todos unidos triunfaremos”. Quizás lo irónico de toda estasituación es que l@s muchach@s de la oposición deberán aprender la de letra si quieren pelear el poder provincial el próximo año.
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